Lo cocido en el E3 de Los Angeles.

Hola lectores/as,

Como por cuestiones de la vida diaria no me ha sido posible escribir mucho por el blog, hoy os traigo una breve pero interesante reflexión acerca de lo que he ido pudiendo ver del E3 de Los Angeles, la gran feria de videojuegos acaecida durante los días 11, 12 y 13 de junio de este mismo 2013.

He de comentar que esta feria nunca me ha decepcionado. Desde su primera celebración en 1995 a cargo de la Entertainment Software Association, las diferentes marcas e industrias del videojuego han indo presentando sus diversas novedades a los distintos medios del periodismo y trabajadores del sector. Desde 1995 hasta hoy ha habido una larga evolución en cuanto a las plataformas, juegos y marcas existentes, además de las conferencias de prensa, las azafatas y personajes de todo tipo con sus disfraces y las formas de presentación de cada videojuego.

Algunas de las novedades: Killzone: Shadow Fall, Watch Dogs, Pikmin 3, Thw Witcher 3: The Wild Hunt, Metal Gear Solid V, Mad Max, entre otras lindezas por el estilo que me dejo por el tintero, que podéis averiguar en la página oficial: E3 Los Angeles. 

Sin embargo, he de comentar una cosa que me ha llamado la atención: aparte de la cantidad de videojuegos y novedades varias que Sony, Nintendo y Microsoft -entre otras- han presentado, me tengo que centrar en las formas de juego de cada plataforma. Además de la mejora de los mandos inalámbricos, del software y del hardware, se está haciendo incapié en la conectividad y la jugabilidad online, quizás incluso demasiado. A lo largo de los años que he ido jugando a diversas consolas -principalmente Sega Master System II, Nintendo 64, Game Boy y Nintendo GameCube-, me lo he pasado genial con mi hermano y con los amiguetes, dispuestos a echar unas cuantas partidas, tomando bebidas y disfrutando. Pero ahora te dan la oportunidad de incluso jugar con gente online de forma masiva, previo registro y pago de sus cuotas para la creación de una cuenta, para pegar tiros horas y horas con gente de la que ni la mitad conoces.

No me malinterpretéis: no estoy diciendo de que esté mal ni de que sea un error, las nuevas tecnologías van cambiando día a día, y las formas de juego también. Pero lo que si es un error es dirigir una forma de juego cada vez más al mundo online, con las consecuencias que eso puede tener.

Si os ha gustado, podéis compartir esta breve reflexión en las redes sociales, o encontrarme en mi twitter habitual.

Que lo paséis bien.