martes, 5 de noviembre de 2013

5. ¿Qué jornadas recuerdas con más cariño?

Lo más parecido que tuve a unas jornadas fueron un par de semanas en la tienda Games Workshop de Heron City, donde se celebaron unas noches especiales llamadas "la noche del veterano". Se celebró una pequeña competición de Blood Bowl en las cuales se sucedían partidas entre un equipo y otro, donde el equipo ganador iba pasando a la gran final y el equipo perdedor era eliminado.
En momentos como éste se demuestra la habilidad y la capacidad de imaginación e improvisación de un auténtico jugador de rol: no disponía de ninguna miniatura de Blood Bowl, y el tiempo que tenía era muy justo para apuntarme. ¿Qué podía hacer? La solución fue bastante rápida y un poco cutre, aunque el resultado fue efectivo: cogí unos cuantos horrores de Tzeentch para pasarlos como hombres-bestias del caos, y unos guerreros de la antigua gama de Warhammer a los cuales les apliqué unas hombreras y brazos de marines espaciales -aplicando algunos cambios y giros en los brazos que me quedaron bastante bien-, además de las bases redondeadas de Warhammer 40.000. Todo pintado de negro y rojo. La cuestión es que finalmente quedaron alucinados con la inventiva en la tienda, y me aceptaron sin problemas para participar en la pequeña competición.

Aunque quedé descartado a primeras de cambio, debido a la cantidad de golpes y lesiones que recibió mi equipo -principalmente y debido al reparto de puntos desde el comienzo: el equipo del caos le quedaba muy poco margen de maniobra para aplicar mejoras a los jugadores, mientras que el resto de equipos tenían más posibilidades de disponer y ponerles habilidades tales como placaje, tipo duro, etc- ciertamente me lo pasé de miedo: un campo de BloodBowl completamente pintado, una pelota de rugby completamente llena de pinchos, y unas jugadas que bien merecieron más de una foto -que luego, cuando cerraron la tienda, no me llegó nada, válgame la mala suerte-. En fin, que me divertí bastante, charlé con unos cuantos jugadores de rol que tendrían mi edad o un poco más y tuve una buena cena en el Pans&Company que había cerca de la misma tienda, para discutir detalles y reglas sobre el juego y compartir novedades y aventuranzas varias.

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